That Feeling.

Sabes que no te queda otra opción, no puede ser de otra manera. Estas todo el día dale que te dale pensándolo, sintiéndolo y también negándolo porque ni siquiera entendes lo que está pasando. Lo único que sabes es que un día lo viste y allí quedaste, atontada mirándolo con cierto encanto, dislumbrada por la profundidad de su mirada aunque sabes que ya no siente nada. Te acordas de esos días en los cuales él por ti mataba y lo daba todo mientras tú estabas entretenida con algún idiota que te hacía sufrir pero a la vez te hacía sentir bien, pero no como más querías; no como ÉL podría. Será que todo estaba previamente planeado para que saliera así, para que sus sentimientos solo se cruzaran por un breve instante en el tiempo y luego no quedara más que miradas y recuerdos.
Cuando lo escuchas pronunciando tu nombre, tu corazón se detiene por una milésima de segundo y luego acelera al máximo mientras todo al rededor se va nublando y vos te quedas como una tarada mirándolo y diciendo, queeee? en cámara lenta como si tuvieras todo el tiempo del mundo pero claro, habrán pasado solo unos segundos para los demás. Y allí ves sus ojos, esa mirada tan extraña que ya no entendes, a la cual no te podes resistir pero sabes que debes hacerlo porque no es correcto, no es posible. Finalmente entras en un estado de frustración enorme y te dan ganas de mandar todo a la mierda por haberte quedado callada por tanto tiempo. Ya no hay nada que puedas hacer, aunque por él darías el mundo y mucho más, no estas segura si a él le fuera a interesar y por miedo a después quedar peor de lo que ya estás, no dices nada, una vez más te quedas callada.